La arena blanca, la tierra rojiza, las arboledas de olivos, el mar turquesa, los atardeceres con sabor a sal… Descubre, con Asento, el estilo balear, un tipo de arquitectura humanizada que trae las sensaciones de las islas baleares a los espacios construidos por el ser humano.
Para entender este movimiento, debemos acudir a los orígenes de la arquitectura en las islas. Se debe a que es una expresión cuya esencia es tradicional, utilizando los rasgos antiguos del alma del archipiélago balear.
El origen se data a los fenicios, pueblo que utilizaba construcciones sencillas y funcionales para su vida en las islas. Recurrían a formas cúbicas para ello, acostumbrando a utilizar arcos en las estructuras interiores y materiales naturales que se pueden encontrar en la zona.
Por lo tanto, se crea una práctica donde la principal fuente de inspiración es la rica naturaleza de las costas mediterráneas. Como hacía el pueblo fenicio, se utilizan materiales autóctonos como maderas de algarrobo y sabina ibicenca. Además de la madera, las piedras también son protagonistas.
El estilo balear se encuentra en plena tendencia, no solo con sus elementos tradicionales sino añadiendo pinceladas frescas de la arquitectura del presente.
Existe otro rasgo que le da forma a esta tendencia decorativa, y se trata de la influencia de la arquitectura en los años 60 y 70. Décadas en las que el archipiélago mediterráneo toma influencia de arquitectos como Sert.
Josep Lluís Sert fue un arquitecto español nacido en Barcelona, quien también destacó en los Estados Unidos tras exiliarse debido al franquismo.
“Sert fue el ejemplo glorioso y trágico del optimismo radical de las vanguardias, así como de la corta e intensa historia de la arquitectura moderna de España»
María del Mar Arnús, autora de la biografía ‘Ser(t) arquitecto’.
En los años 20, Sert encontró, en Ibiza, a los dos amores de su vida: su mujer y la arquitectura tradicional de la isla.
Sert observó las antiquísimas construcciones cúbicas de la isla, serenas, ascéticas y racionales. El joven arquitecto encontró la inspiración en las islas baleares, aprendiendo cómo esta arquitectura fusiona ser humano y naturaleza.
“La arquitectura ibicenca es una arquitectura sin estilo y sin arquitectos. Unas construcciones geométricas sencillas, puramente utilitarias, de una dignidad ejemplar, un reposo para los ojos y para el espíritu … todos sus elementos tienen la medida justa, la medida humana” escribía Sert en 1934.
Esta influencia se plasmó en todos los proyectos de su carrera.
En la actualidad, el estilo balear bebe de las obras del arquitecto vanguardista, cerrando un círculo de retroalimentación entre la isla y la figura de Sert, entre la tradición y la modernidad.
A continuación, repasamos los elementos que componen este gran movimiento. Las claves que la conforman y que consiguen evocar el espíritu de las islas.
La sensación de patio o porche también se realza con el uso de techo de cañizo.
Otro recurso es una estrategia de colocación de espejos. Los espejos potencian la luz natural y amplían los espacios.
Las amplias ventanas utilizadas por el movimiento balear son de balcón, con palilleria de madera, en arco y se extienden hasta el suelo.
La vegetación en los espacios de baleares es frondosa, formando parte del espacio.
El estilo balear nos trae la tradición de la isla a la actualidad con el uso tanto de elementos naturales como de toques modernos y en tendencia.
Es una arquitectura que busca fundirse con el espacio, no irrumpir en él, y lo consigue alzándose con materiales autóctonos.
Se utilizan colores cálidos, vegetación y se da protagonismo a la luz natural, evocando los paisajes del archipiélago.
Si quieres saber más sobre movimientos en tendencia y otras áreas de la arquitectura, diseño e interiorismo, visita el blog de nuestra web, donde siempre te mantenemos al día con las novedades del sector.
Recuerda que en Asento te proponemos el mejor equipamiento y decoración para que tus estancias logren su mejor versión posible.